SEAT había iniciado su actividad deportiva con la puesta en escena de la Fórmula Nacional 1430 en el año 1.970. Este trofeo monomarca debutó en el circuito del Jarama, con un gran éxito de participación, 27 coches en la parrilla.
En el año 1.977, Antonio Zanini obtuvo el Campeonato de España de Rallyes para SEAT, en los mandos de un SEAT 124 Grupo 5. Era un auténtico prototipo, que por motivos de reglamentación, fue sustituido en la
temporada siguiente por el 131 Abarth.
Desde entonces el 124 "proto" como popularmente se le conocía en la época, descansa en casa de Antonio Zanini, siendo contadas las ocasiones en las que ha salido del garaje.
Es la unidad más rápida y eficaz que SEAT construyó del 124.

El motor está desarrollado a partir de un bloque FIAT de 2 litros, elevando su cilindrada hasta los 2.090 c.c. gracias al mayor diámetro de los pistones. La culata de 4 válvulas por cilindro, aunque estaba fabricada en España, era una copia de las Abarth.
Este motor se alimenta a través de dos carburadores Weber de 45 mm, pero también llegó a utilizar un sistema de inyección electrónica, similar al que se montaba en los 131 Abarth y BMW 2002 ti.
Se anunciaba una potencia de 210 cv, pero Zanini asegura que en el mejor de los casos se obtenían 190.
Con un peso muy contenido de apenas 1.000 kilos, era muy competitivo frente a los Porsche 911, Lancia Stratos, Renault Alpine de la época.

El motor es potente, el coche es muy incómodo, la suspensión dura como una tabla. Conducir este 124 Grupo 5, no es tarea fácil, la dirección al no contar con asistencia resulta muy dura de accionar, la caja de cambios ofrece una relación muy ajustada y un manejo preciso. Gracias a la propulsión trasera y al eficaz autoblocante trasero, el coche resulta muy divertido de conducir.
FUENTE: Revista Automóvil Nº 302.